martes, 15 de mayo de 2012

La comunidad subterránea de invertebrados (y de vertebrados) que vive a mayor profundidad dentro de una cavidad natural

Desde que comenzó el año, en este blog no hemos dejado de recoger los resultados las investigaciones acometidas con el material biológico recolectado en la expedición de verano de 2010 a la sima Krúbera-Voronya. Así, en enero, presentamos la nueva especia Catops cavicis, un pequeño coleóptero, mientras que en febrero dimos a conocer la extraordinaria noticia de la descripción de cuatro nuevas especies de colémbolos, bautizadas como Schaefferia profundissima, Anurida stereoodorata, Deuteraphorura kruberaensis y Plutomurus ortobalaganensis.

Algunos de los inquilinos de la sima Krúbera-Voronya.
La última de estas criaturas ostenta el nada desdeñable récord de ser el animal terrestre que desarrolla su ciclo vital a mayor profundidad dentro de una cavidad natural. Esta noticia provocó gran revuelo a nivel internacional, convirtiéndose en trending topic. Y es que, con apenas "tres meses de vida", ya cuenta con más de 40.000 entradas en Google. Las cinco nuevas especies mencionadas, junto con otras siete de las que ya se tenía conocimiento de su existencia en otras cuevas del Cáucaso occidental, conforman la comunidad de invertebrados que habita en los confines del mundo subterráneo más alejados de la superficie hasta ahora hollados por los espeleólogos.

Fauna hipógea registrada a cada profundidad en la sima Krúbera-Voronya.


La referencia del interesante artículo que detalla los pormenores de esta peculiar comunidad biológica es la siguiente:
  • Sendra, Alberto and Ana Sofia P.S. Reboleira. 2012. The world’s deepest subterranean community - Krubera-Voronja Cave (Western Caucasus). International Journal of Speleology, 41 (2): 221-230.
Se puede descargar tanto el resumen como el texto completo.

Hábitats y gradiente de temperaturas en el interior de la sima Krúbera-Voronya.
Este estudio, firmado por los biólogos Alberto Sendra y Ana Sofia Reboleira, constituye toda una novedad, puesto que, hasta la realización del mismo, no se había documentado la existencia de comunidades animales ni de artrópodos subterráneos a cotas que sobrepasaran los 1.000 m de profundidad. El motivo de ello es que los sistemas subterráneos de desniveles kilométricos resultan inaccesibles a los biólogos, a menos que se incorporen a los equipos que los están explorando, de tal forma que los primeros puedan dedicarse en exclusiva a sus tareas científicas, mientras que los segundos les proporcionan toda la logística necesaria para ello, así como apoyo en el muestreo en aquellas partes de la cavidad de difícil acceso. Esta simbiosis fue la que tuvo lugar en el transcurso de la mencionada expedición de 2010 entre el CAVEX Team y el equipo de especialistas en bioespeleología, formado por Alberto Sendra y Ana Sofia Reboleira, revelándose, a la vista de los resultados obtenidos y de los que ya hemos dado buena cuenta, como totalmente satisfactoria.

Pilar Orche recibe las instrucciones de Ana Sofía Reboleira de colocación de las trampas pitfall en los vivacs de la sima.
Pilar Orche poniendo en práctica las lecciones recibidas para instalar las trampas en el vivac de -700 m.
La investigación llevada a cabo en el valle de Orto-Balagán, ha puesto de manifiesto que la biota de la sima Krúbera-Voronya está compuesta por troglobios y especies epígeas que se extienden desde la boca de la cavidad hasta los 2.140 m de profundidad. Explican los expertos en su trabajo que los ecosistemas subterráneos no deben contemplarse solamente como un punto de inflexión hacia las adaptaciones troglomórficas que permitan conquistarlo, sino también como refugio para aquellas especies procedentes de la superficie que buscan un lugar donde guarecerse para sobrevivir en épocas en que las condiciones en el exterior de la cueva son extremadamente severas, como ocurre en el Cáucaso, en donde en invierno pueden llegar a caer varios metros de nieve. La mayor parte del sustento de los pequeños inquilinos de la sima Krúbera-Voronya proviene de fuentes alóctonas de materia orgánica, como son las aguas superficiales que se infiltran o la actividad de animales dentro y fuera de la cueva. Y es que el macizo calcáreo que domina la región funciona como una gigantesca red de grietas y tubos, como si se tratase de un epikarst de centenares de metros de profundidad.

Paleando nieve tras una ventisca. Expedición invernal a la sima Krúbera-Voronya en 2007.
Desde este rincón por medio del cual el CAVEX Team va informando de las novedades que le atañen, debemos confesar que ya en la propia sima sabíamos que lo que allí estábamos a encontrar iba a suponer una revolución, como así ha quedado demostrado en el artículo de nuestros colegas bioespeleólogos. Y es que durante la campaña de muestreo, algunos de los especímenes los recolectamos en lugares en que nuestros expertos no nos habían pedido que buscásemos (puntos alejados de los vivacs, con corrientes de agua y aire), pues en teoría en ellos no era previsible hallar ningún troglobio. Sin embargo, la suerte sonríe a los audaces y ahí está el resultado. ¡Qué alegría más grande tan increíbles hallazgos! ¡Y eso que en un principio lo que se pensaba estudiar en esa expedición era la comunidad “vertebrada”, gracias a la Cátedra de Teoría y Metodología de Modalidades Deportivas Aplicadas y Actividades Extremas de la Universidad Estatal Rusa de Cultura Física, Deporte y Turismo!

A continuación, se recogen algunas de las noticias aparecidas en prensa relativas al novedoso estudio sobre la biocenosis de la sima Krúbera-Voronya:

Sofia Reboleira muestreando directamente.
Para concluir, desde el CAVEX Team quisiéramos hacer algunas puntualizaciones en cuanto a algunos datos proporcionados por algunos medios de comunicación:
  • La pequeña república del Cáucaso en donde se ubica la sima Krúbera-Voronya se denomina "Abjasia" en español, "Abkhazia" en inglés y "Абхазия" en ruso, y se ubica en la vertiente occidental de esta cadena montañosa.
  • El CAVEX Team no es un equipo de la Universidad Estatal de Moscú, sino un que se trata de un club de espeleología con sede oficial en Carmona (Sevilla, España) y que cuenta entre sus fundadores con antiguos estudiantes de dicha Universidad.

1 comentario:

  1. Muy interesante lo de los "bichos" esos. Parece mentira hasta a donde se "prolonga" la vida.... Gracias por hacernos saber de ello
    Daniel Ortiz

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